jueves, 12 de mayo de 2011

Murcia y las víctimas del terremoto

La seguidilla de terremotos que asoló a la zona de Murcia llega a España en mal momento, con más de 20% de paro entre los trabajadores y el peligro cierto de correr la misma suerte que Grecia, donde se llamaría a Domingo Felipe Cavallo para salir de la crisis.

Murcia, como todo el sur y sudeste de la península, incluyendo la cercana Andalucía, tuvo una decisiva influencia árabe. Y quizás por eso, o por alguna otra cosa, los andaluces tienen una inmerecida fama que aquí se trasmitió a nuestros cordobeses, de los cuales Luis Juez es el exponente más notorio.

El señor Jesús Planes y Planes, del Servicio de Emergencia de la Región de Murcia (SERMU) afirmó hoy ante las cámaras de la Radio Televisión Española (RTE): "Han habido ocho muertos a consecuencia de los temblores, pero con el paso del tiempo y el correr de las horas y los minutos, estimamos que lamentablemente el número de víctimas se reducirá".
Plop!!!

martes, 10 de mayo de 2011

¿Adiós a la Cajita Feliz?



Cuarenta años atrás, un entrepreneur norteamericano, nos referimos a Ronald McDonald, pensaba y pensaba cómo imponer en el mercado sus deliciosas hamburguesas elaboradas con las más finas e higiénicas lombrices de California.
En esa época, la producción local de carne de vaca, cerdo, merluza y pollo provenientes de Arizona y Dakota apenas alcanzaba para abastecer a los 20 millones de soldados que EEUU había distribuido por el mundo para hacer más seguro al Mundo Libre.
Fue así como Ronald inventó LA CAJITA FELIZ, el delicioso combo de un tentempié de grasas saturadas que se vende a precios populares con un juguete de regalo.
Pasaron los años.
El Mundo Libre se hizo más seguro gracias a esos 20 millones de héroes anónimos que a punta de fusil, bayoneta y bomba atómica, nos permitieron dormir desde entonces sin sobresaltos. Si ayer lo teníamos a John Wayne, hoy el mismísimo Rambo es capaz de infiltrarse en Pakistán y acabar con el enemigo por derecha o por izquierda.
Pero cada paraíso tiene su fantasma: la obesidad fue avanzando en el mundo como una plaga. ¿Que importan las grasas saturadas y la grasa chorreante de los BigMac si los chicos tienen un instante de felicidad plástica, eh?
En ese orden, el legislador Juan Cabandié ha presentado un proyecto para controlar el sobrepeso de la población de la ciudad, y para eso hay que empezar aboliendo la cajita feliz.
Lo ha hecho, nos aseguran, informado de que hace unos años, el pueblo español se rebeló contra el McDonald's cuando se descubrió que los juguetes provenían de tenebrosas factorías chinas donde imperaba el trabajo esclavo maoísta.
El proyecto llega en mal momento.
Una encuesta de Artemio López reveló que la mayor parte de los padres que adquieren cajitas felices para lograr que sus hijos los dejen tranquilos por un rato, votarían a Macri porque les encanta que el candidato del Pro baile sobre un escenario como un payaso.
- Es un pelotudo- reveló uno de los encuestados, y agregó: -¡por eso lo voy a votar!
La escena de Macri bailando sobre un escenario con Gabriela Michetti, cuatro años atrás, quedará por décadas grabada en la retina perpleja de los porteños.
Los equipos de asesores de uno de los precandidatos del Frente para la Victoria para la ciudad de Buenos Aires están trabajando en la creación de una CAJITA FELIZ JUSTICIALISTA.
- Queremos ir más allá del tradicional choripán- reveló uno de esos asesores.

No es la primera vez que el peronismo recurre a medidas demagógicas para ganarse a la población.
En realidad, si uno deja de lado toda la cháchara sobre soberanía política, independencia económica y justicia social, el peronismo es pura demagogia.  Así lo confiesa el compañero Carlos Roberts en su carta abierta a la Presidenta que publicó el diario La Nación aquí.
Roberts aconsejó a la Presidenta que, si no gana, se refugie en alguno de sus hoteles en El Calafate. Él mismo prometió que si sí gana Cristina, promete retirarse a alguno de sus extensos campos sojeros situados en la pampa húmeda, y seguirá viviendo de sus inversiones bancarias y en la distribución de automóviles, donde le ha ido muy pero muy bien  en los últimos años.
Pero volviendo a la CAJITA FELIZ que ahora pretende abolir Juan Cabandié: en aquella época olvidable, el General Perón también repartía regalos a troche y moche.
No era, por cierto, un combo de lombrices californianas y juguetes desechables fabricados en la China bolchevique con trabajo esclavo sino una de las famosas realidades efectivas:

lunes, 9 de mayo de 2011

Un rebote mató a Ferreyra

Fuentes judiciales confirmaron que una pericia conjunta de la Policía Federal y la Gendarmería Nacional determinó que el disparo que mató al estudiante Mariano Ferreyra no fue directo (y por lo tanto, intencional) sino el rebote de un proyectil apuntado vaya uno a saber hacia dónde.
Si esta pericia se confirma, mejorarán las chances procesales de los imputados, entre ellos el dirigente José Pedraza.
(¿Pedraza, dónde están los más de 100 millones de dólares cash que le giró M***m para hacer del ferrocarril Belgrano Sur el tren más exitoso del mundo?).
Los seguidores de las teorías conspirativas sostendrán que la pericia es sospechosa porque no está todavía del todo claro el papel de la Federal en ese día fatídico. Y además, colegirán, ese resultado va a alimentar a la muy alicaída campaña de la izquierda unida en el espanto, dándole una bandera comparable a esa famosa arenga de Bartolomé Mitre en la guerra de la Triple Alianza: "En 24 horas en los cuarteles, en 15 días en campaña, en 3 meses en la Asunción", que como todos sabemos se cumplió al pie de la letra.
Altamira está a un tris de denunciar ante la OEA que la pericia es otro capítulo de la conspiración ferroburosindicokirchnerista que pretende cerrarle el camino al poder del campesinado y el proletariado.



conspiración

Mediciones que no mienten, por Adrián D'Amore

Leemos aquí:

A fines de 2008, mi barrio estaba empapelado con los afiches de La elegida y el elegidor, el libro de Jorge Asís editado por Planeta que se pretendía sostén intelectual de la teoría del doble comando.
Un año después, le tocó el turno a El dueño, en el que Luis Majul explicaba cómo Néstor Kirchner se transformó en el presidente más rico, poderoso y vengativo de la Argentina a fuerza de chanchullos incontables. Peleando algunas carapantallas, pero menos, estaba Radiografía de mi país, en el que Oscar González Oro narraba la Argentina que le dolía.
Hace un año exactamente, a caballo de la trifulca política por el uso de reservas del BCRA para pagar deuda, Planeta saturó las paredes de San Cristóbal y Constitución con el bodoque de Martín Redrado. Su pretenciosa bajada (“Un límite al poder absoluto”) daba un poco de pena mientras por delante miles de personas desfilaban por San Juan hacia la 9 de Julio para participar de los multitudinarios festejos del Bicentenario.
En marzo de este año, el circuito de carteleras que Planeta parece rentar por mi barrio insistió tímidamente un par de semanas con el último del ingenioso Asís: El kirchnerismo póstumo. Pero desde abril cambió el paisaje rotundamente. Los afiches de El flaco y del manual con las zonceras de Aníbal Fernández monopolizan (qué fea palabra) la vía pública.
¿Cooptación editorial del kirchnerismo apátrida? Nah… ¿Fingido ejercicio de alcahuetería? Tampoco. Los libros de Feinmann y del jefe de gabinete de ministros son los más vendidos de la editorial Planeta.
Nadie debe asombrarse de que los empresarios traten de ofrecer los productos que la gente quiere (o parece querer) adquirir. Y que en esta carrera no distingan banderías ni políticas ni culturales ni ideológicas.
Lo que parece cada día más claro es que mientras muchos cacarean para la tribuna, a la hora de la caja (como diría Asís) toman nota, agachan la cabeza y enfilan para el lado que sopla el viento.
Y, les guste más o menos, estas mediciones confirman con la fuerza incontrastable del bolsillo lo mismo que la mayoría de las encuestas, sean truchas o verdaderas.
Cristina 2011.

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